La agroexportadora concursada Vicentin reactivará sus plantas tras firmar acuerdos de fasonado con grandes empresas del sector. Procesará granos de terceros en San Lorenzo y Ricardone, lo que le permitirá sostener las fuentes de trabajo.
Las plantas de la agroexportadora podrán operar durante al menos seis meses. “Esto asegura el pago de sueldos”, señalaron desde la intervención.
La empresa Vicentin SAIC logró avanzar en su reactivación industrial a partir de la firma de ocho contratos de fasonado con importantes compañías agroexportadoras. Según informaron los interventores judiciales al juez Fabián Lorenzini, las plantas de procesamiento de soja en San Lorenzo y de girasol en Ricardone volverán a operar para prestar servicios a terceros.
Los contratos fueron presentados el 26 de mayo y aceptados formalmente al día siguiente. Incluyen acuerdos con Cargill, Bunge, Viterra, ACA, Louis Dreyfus, Molinos Agro, Commodities y Ammagi. Las empresas utilizarán la infraestructura de Vicentin para procesar materias primas de su propiedad bajo condiciones pactadas, que detallan tonelajes, precios, plazos, logística interna y uso de muelles, entre otros puntos.
La planta de San Lorenzo, una de las más grandes del país, vuelve a estar activa aunque sin operar con grano propio. En Avellaneda, en tanto, se mantiene la actividad bajo contratos previos de maíz, sin novedades de ampliación.
El Juez Civil y Comercial de Reconquista, Fabián Lorenzini, avaló ocho contratos para el procesamiento industrial de soja y girasol en las plantas industriales que la caída Vicentín tiene en San Lorenzo y Ricardone, incluyendo la terminal portuaria.
Aunque los contratos permiten ingresos por servicios industriales, no implican recuperación financiera ni solución de fondo para la empresa. La sostenibilidad del proceso sigue atada a decisiones judiciales clave y a la evolución de la situación económica general.
