El Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) informó que durante 2024 la producción láctea a nivel nacional acumuló 10.590 millones de litros. Este volumen representó una caída del 6,5% con respecto al año previo, una merma de 710 millones de litros.
El estudio de la entidad confirmó un comportamiento por demás heterogéneo en los establecimientos lácteos. Se pudieron determinar que la producción lechera mostró diferencias significativas, según el tamaño de los tambos, los niveles de productividad y las distintas regiones geográficas.

Hya que tener en cuenta que si bien en agosto hubo un leve retroceso, luego se registró un crecimiento mensual acumulado del 1% mensual. De todos modos, la comparación interanual de la producción de leche en distintas provincias durante 2024 mostró grandes variaciones respecto del año anterior.
La metodología utilizada por OCLA solo tiene en cuenta aquellos tambos que han remitido información en ambos años, excluyendo los tambos que cesaron actividades, comenzaron recientemente o dejaron de proveer información.
En las provincias de Córdoba y Santa Fe -cuencas lecheras responsables de dos tercios de la producción nacional- registraron importantes caídas en su producción. Así, los recortes observados en el período enero-junio en Córdoba y enero-septiembre en Santa Fe resultaron determinantes para la baja general experimentada durante el año.

El análisis por estrato productivo dejó en claro que los tambos con más de 6.000 litros diarios de producción presentaron una reducción menor, del 0,7%, e incluso lograron superar los volúmenes del año anterior en cinco meses.
Por otro lado, los tambos de nivel medio y bajo sufrieron caídas más significativas, del 7% y 11,2% respectivamente. Factores como el estrés térmico, limitaciones financieras para gastos en alimentación y condiciones sanitarias afectaron de manera importante a estos segmentos.
Proyecciones de OCLA
Para 2025, OCLA elaboró sus proyecciones, a partir de la información aportada por 15 industrias lácteas que reciben y procesan alrededor del 49% de la leche de Argentina. Los datos preliminares indican una suba del 5,72% anual, con una producción estimada para 2025 en 11.190,2 millones de litros de leche.
Y remarcaron: “Las condiciones de alta volatilidad e incertidumbre que seguramente caracterizarán el año que recién iniciamos, pueden generar importantes diferencias respecto a los números proyectados”.
El informe también analizó cuales podrían ser los factores que pongan un techo a ese crecimiento. Uno de los puntos que mencionaron es la posibilidad de una reducción en los derechos de exportación en soja y otros granos, “que incrementarían los costos de alimentación y el valor de los arrendamientos rurales”.
En este punto, remarcaron que algo más del 50% de la superficie destinada a la producción de leche se realiza sobre campo alquilado. De este total, un gran porcentaje de los arrendamientos están pactados en valor soja. Además, mencionaron otros factores como: la reducción en el número de vacas, el cese de unidades productivas, la continuidad en el crecimiento de la marginalidad, y el retraso cambiario o pérdida de competitividad de nuestras exportaciones a pesar de los buenos precios en el mercado externo.
